Recuerdo cuando era chico como había una especie de culto hacia estados unidos. Un culto que era alimentado por las muchas personas que anhelaban poder cumplir el sueño americano, por películas, televisión, radio y por los triunfantes conquistadores que habían hecho realidad este sueño y no les quedaba la boca pequeña en elogiar la grandeza de américa ni lo asqueroso de su tierra madre. En mi también fue fomentado este sueño de manera sublime, aunque extrañamente también me fue cultivado un odio hacia usa por la gran cantidad de atrocidades que cometen en todo el mundo. Es un sentimiento extraño, te odiamos pero queremos estar en tus tierras.
Historias de gente que besa suelo americano apenas se baja del avión, para que luego tengan inspección rectal de aduanas, bienvenidos a américa, lugar de libertad.
Aprendí inglés porque me gustaba consumir los productos fílmicos americanos y por supuesto al igual que mucha gente me cree una concepción muy errónea de lo que es la vida en américa, hasta me imaginaba viviendo en realidades inexistentes. Pero el despertar ocurrió unos años después cuando me di cuenta de la realidad americana, de que se trabaja mucho y se conduce el resto del tiempo. De que cada uno tiene su espacio y asi se separan más, de que no hay una unión familiar, del
fake hapiness, del consumismo tan bárbaro, de lo bien que se las han arreglado para vender una imagen de una realidad inexistente, la rigidez de pensamiento (o blanco o negro pero no gris) y de muchas otras cosas.
Muchas cosas así hicieron que mi fervor pro américa se hiciera anti américa y por eso decidí explorar Europa, donde hay una mezcla bien legitima de culturas, de historia y de vida. Sabia que tarde o temprano tendría la oportunidad de regresar a estados unidos y por fin ocurrió (en contra de mi voluntad ya que era el cumpleaños de Tanya)
Estuvimos en dos ciudades muy famosas y cercanas. Washington y Nueva York.
Washington es una ciudad demasiado perfecta para mi gusto. Completamente limpia, con semáforos peatonales en cada esquina que nunca cambian a verde, con un "
downtown" super aburrido. Tuvo partes buenas, como que el zoológico era gratis, al igual que otros museos super interesantes (museo espacial, músico judío, monumento de Washington). La casa blanca es más bien patética en tamaño. Las distancias son enormes (bueno eso es en toda américa). Lo que más me gusto fue el monumento a Washington, todos lo hemos visto, ese obelisco gigantesco que aparece en Forrest Gump donde se encuentra con Jenny. Es la estructura masónica más grande del mundo y de veras que se veía muy imponente.
Me causaron curiosidad algunos edificios que eran cubos de concreto enorme que al ser terminados se dieron cuenta que eran muy feos y les añadieron unas columnas al frente para tapar el mal gusto del diseñador.
Nueva York en cambio es una de esas ciudades de las cuales es muy difícil no enamorarse. Por más que se trate ella te atrapa en su telaraña cuadriculada de calles y te cautiva con el tamaño de sus edificios. El nombre "jungla de concreto" se entiende perfectamente cuando se deambula entre edificios tan hermosos y titánicos.
La gente de NY es famosa por su actitud agresiva y despiadada. Y no se tardó mucho ser recibido con el tan infame comportamiento. Teníamos una reserva para un lugar donde dormir, y el tipo de muy mala gana me pido mi nombre, al no encontrarme me dijo que se lo dijera otra vez, cuando ofrecimos escribirlo nos respondió agresivamente, hey, yo tengo orejas, puedo escuchar. Luego de volver a buscar dijo lo siguiente con una cara de ogro.
You are not in my system, have a nice day.
Luego vinieron otros altercados y gritos, pero al final el tipo empezó a decir que esto era Nueva York y aquí se tiene un actitud y se sobrevive así. Me pregunto si la gente realmente tiene la actitud o porque viven en tan grandiosa ciudad se creen con el derecho a tenerla? Y que es eso de "have a nice day"? tiene que ver con lo que hablaba del "
fake hapiness".
Hubo varios lugares que me encantaron de NY, central park esta genial, china town, Brighton beach en Brooklyn, el puente de Brooklyn, Times Square. También tiene museos extraordinarios, como el Museo de Arte moderno, el museo de historia natural y mi favorito el Museo de la
isla de Ellis. En este lugar se narra la historia de la migración mas grande que ha tenido la humanidad en un curso de tiempo tan corto. Por 60 años américa recibió a cuanto persona saludable y joven pudiese entrar; con un territorio tan extenso y con tantos recursos naturales por explotar fue una magnifica idea para fortalecer la economía y construir la infraestructura del país. Les funcionó muy bien la idea sobre todo cuando trajeron esclavos a los que no tenían que pagar sueldo. En teoría el 40% de la población de estados unidos puede rastrear un antepasado cuyo primer borde de entrada fue la isla de Ellis.
Una cosa que me causo mucho fastidio fue la obsesión que tienen por llamar a todo "
our nation", "
this country", "
American national ..." También era alucinante la cantidad y el tamaño de banderas y la paranoia que tienen con la seguridad, había que pasar por rayos X y detector de metales en todos lo lugares famosos y la cantidad de normas que hay por todo y en todo lado. Saque la conclusión cínica de que las banderas están en todos lados para recordar que a pesar de las miles de reglas que existen, hay libertad en américa. Ese sera tema de otro post ya que este ya esta muy largo.
Encontré o tal vez quise ver las generalizaciones de América, edificios grades, vías grandes, carros grandes, gente grande (obesa), porciones de comida grandes (no tanto) y sobretodo grandes cuentas por pagar.
Nueva York, al igual que has hecho con tantos que han pasado por tus calles, me has cautivado con tu tamaño y espíritu indomable.